Escrito por:
ROGELIO RODRIGUEZMuchos autores dicen que busques un lugar y que respetes un horario detrabajo, tal como lo harías en una empresa. ¡Ja! Eso lo puedesconsiderar tú, pero si vives con tu mamá o tienes una esposa, lo que túpienses no viene mucho al caso. A menos que te encierres (lo que teocasionará problemas en cuanto salgas), en todo momento se abrirá lapuerta para decir “Ve a hacer esto ¿Porqué no? ¡Tú puedes ir!”
“¿Porqué yo?” podrás preguntar “Dile a alguien más”. La respuestaserá, irónicamente, “Es que todos están trabajando”. Si se te ocurrecontestar que tú también estás trabajando, seguramente recibirás unamirada de odio, seguida de alguna expresión de “Sí como no…”
Por desgracia, el
trabajar en casa tiene sus problemas,especialmente si vives con alguien más. Tal vez te hayan dicho quetrabajar en casa es hermoso: tus propias horas, comodidad, ahorro entransporte y otras. Lo que nadie dice son los mil pedidos de encargos ymandados, además de las miradas de “púdrete” si no lo haces.
Sí, nada es tan bello como parece. Aún así, lo puedes hacer, sicompras un buen candado y lo pones por dentro. Aprende a vivir con lasmiradas de odio; a fin de cuentas, si vas a pagar las cuentas, setendrán que acostumbrar.
Tomar tu negocio en serio no solo es cuestión tuya; debes poderhacer que los demás vean tu punto de vista, sobre todo cuando estánafectando tu desempeño. Hay que tener la fuerza para decir “No” y poderseguir adelante. De otra manera, difícilmente podrás levantar esenegocio que tanto
quieres.
Sigue el enlace para ver
formas de ganar en Internet desde tu casa.
Fuente del artículo:
http://www.articulo.org/idx/90/6237/Negocios-desde-casa/article/Los-bemoles-de-trabajar-en-casa.html